Rutinas

Las canas son una despigmentación del pelo. Dejarlas a la vista o no es una elección personal. Si eliges teñirlas, hazlo con coloración vegetal, sin dañar el cabello y respetando su tono y su estructura. Si quieres dejarlas blancas, te recomendamos mascarillas semanales de Ghassoul, que eliminará las toxinas adheridas al pelo. Para mantenerlas suaves, alíate con el karité

Con la llegada del frío, el cabello sufre: calefacciones extremas, frío en la calle, viento, abuso del secador… La parte más externa del cabello, la cutícula, necesita cuidados específicos al estar más expuesta a la intemperie. Pero también los folículos pilosos, la concavidad bajo la piel en la que nace cada pelo, una de las zonas más activa de todo el organismo y donde se encuentran las glándulas sebáceas. En invierno, estas glándulas sufren un efecto vasoconstrictor sobre el cuero cabelludo y dejan de producir la grasa natural del cabello, resecándolo, produciendo más electricidad estática y encrespamiento. Además la estructura de la proteína del cabello (queratina) responde al frío y se vuelve más rígida, provocando encrespamiento. La solución es hidratar, proteger y aportar vitaminas extra, y todo ello lo encontrarás en nuestros aceites capilares, en productos de uso diario como el Sérum hidratante de Silicio y Jojoba y, por supuesto, en la coloración vegetal y tratamientos capilares con plantas como la Cassia Obovata.

Si tienes caspa es importante cuidar el cuero cabelludo. Elige un buen champú para controlar la caspa, nosotras te recomendamos el Champú sólido de Brea de Enebro. Completa los cuidados aplicándote Infusiones Capilares de Laurel, Tomillo y Ortiga, que equilibran el cuero cabelludo. El Ghassoul es un exfoliante natural ideal para evitar la caspa, porque facilita la eliminación de las células muertas.

Aplicar tintes sintéticos acaba pasando factura. Necesitas desestresar el cabello, eliminar los restos sintéticos de productos o tintes y permitirle volver a respirar. Pasos importantes: Aceites para hidratar, Champús de calidad, Sérum para las puntas y Cassia Obovata o Coloración vegetal para aportar vitaminas. Pon a tu cabello en "Cuidados Intensivos" y lo recuperarás.

¿Sabías que el encrespamiento del pelo se debe a una falta de hidratación y de pérdida de humedad? El viento y el frío lo debilitan, y el uso excesivo de las planchas o el secador provoca una pérdida de humedad natural. Pero que no cunda el pánico, en Henna Morena tenemos lo que necesitas para devolver toda la suavidad y fortaleza a tu cabello. Te aconsejamos una mascarilla semanal con uno de nuestros Aceites de Almendras si tienes el cabello grueso y seco, o con Aceite de Petit Grain y Pepita de uva si lo tienes deshidratado o dañado por productos sintéticos, un tratamiento intensivo para recuperar la hidratación en profundidad. Y siempre, después del lavado, utiliza el Gel de Aloe o nuestro Sérum de Silicio y Jojoba, que evitarán la deshidratación que produce el encrespamiento.

Si te notas el cabello pobre, fino y sin volumen, tenemos una buena noticia para ti: la combinación de las mascarillas con Aceites Capilares semanales, el Champú de Salvia y Naranja y los aclarados con Infusión de Romero y Salvia te llevarán a tener un melenón con volumen y brillo. ¡A por ello!

El brillo es resultado de un cabello sano, hidratado y con una estructura capilar sin dañar. Para ello te aconsejamos baños de aceites al menos una vez a la semana y un tratamiento de Cassia Obovata (no tiñe). Si prefieres pigmentar te recomendamos la Henna cada dos semanas o un tratamiento con la fórmula de Nogal para cabellos oscuros. En 6 semanas verás un cambio radical en tu cabello. ¿Empezamos?

Aceite, aceite y aceite. No hay nada mejor para reparar el cabello y sellar las puntas. Los aceites vegetales prensados en frío penetran muy bien en la epidermis y el cuero cabelludo, y los protegen reconstituyendo la capa lipídica. Tienen efectos calmantes, suavizantes, tonificantes, regeneradores y frenan el envejecimiento prematuro. Sobre el cabello, el aceite crea una capa protectora que lo impermeabiliza, lo protege contra las agresiones externas. Bienvenida a una vida sin puntas abiertas.

El Método Curly es una tendencia de cuidado del cabello rizado que prescinde de ingredientes que deshacen el rizo. El Método Curly evita sulfatos y siliconas, materias que se depositan en el cabello y que pueden ocasionar sobresaturación en el pelo. Los cabellos rizados suelen ser muy secos y se deshidratan muy fácilmente, por lo que también se aconseja eliminar productos que resequen el cabello, como los alcoholes, los tintes sintéticos y los secadores, además de basar el cuidado en la hidratación. Consulta nuestro artículo sobre el Método Curly.

El embarazo es un período de cuidado de una misma, de reconectar con el cuerpo y con la naturaleza. En esta etapa muchas mujeres buscan una alternativa natural, segura y compatible con el embarazo para teñir el cabello y descubren la coloración vegetal. La Henna y la Cassia Obovata son poderosas plantas que tratan la caída de pelo tras el parto y lo revitalizan, que además te aportarán volumen, minerales y vitaminas. Los aceites capilares, aplicados de forma regular, cuidan el cabello aportando nutrición y mucho brillo. La manteca de Karité será un imprescindible. Hidratante, nutritivo y regenerador de la piel, es el producto perfecto para tener una barriga sin estrías durante los 9 meses de embarazo y para el cuidado del pezón. También para realizar masajes en las piernas esos días en que las notas tan pesadas.

¿Haces deporte a diario y el cuidado de tu cabello te trae de cabeza? Con la rutina adecuada, puedes compatibilizar el deporte con mantener un cabello tan sano como tu cuerpo. Pásate al champú sólido de Té Verde y lávate el pelo a diario sin preocuparte por resecar o desproteger tu cabello, porque está formulado especialmente para uso frecuente. Además, su formato sólido es muy cómodo para llevar contigo en la mochila del gimnasio. Si te pasas el día en el agua, tu segundo aliado serán los aceites. Recuperarán la capa lipídica del cabello y lo mantendrán impermeabilizado, de manera que ni el cloro ni la sal le resten brillo ni hidratación. Después de correr o de una sesión de yoga, date un masaje con nuestra manteca de Karité: es rico en Lupeol, un antiinflamatorio natural.

Habrás oído hablar de los beneficios de un “detox” para depurar el organismo. ¿Sabías que tu cabello también lo necesita? El pelo acumula impurezas, tanto de los productos que utilizamos como de la contaminación ambiental, que no se eliminan simplemente con el lavado habitual. De ahí la importancia de hacer un tratamiento detox capilar de vez en cuando. ¿Cómo? Muy fácil: con una mascarilla de arcilla volcánica Ghassoul y con alguna de nuestras recetas caseras de detox capilar. Consulta nuestro magazine.

El mejor tratamiento anti-caída es la combinación de un tratamiento semanal de Cassia Obovata, Henna o Nogal, que lo fortalecen, y la hidratación desde la raíz con los Aceites Capilares, con mascarillas frecuentes. También recomendamos el lavado con Champú Vegetal en Polvo elaborado a base de Shikakai, una planta que mejora la circulación sanguínea del cuero cabelludo además de limpiar el pelo y el cuero cabelludo de impurezas.

Piscina, mar, sol... esas palabras mágicas que nos dicen que el verano por fin ha llegado. Con él, toca extremar el cuidado de nuestra melena. El sol altera la película protectora del pelo, dejándolo seco, sin brillo, áspero y frágil, por no hablar de su efecto decolorante que se acentúa cuando lo combinamos con el cloro o la sal. A diferencia de la piel, el cabello no tiene mecanismos de defensa y por eso se reseca y envejece de forma más evidente. Te recomendamos los siguientes productos para cuidar el pelo en verano: aceites como el de Pepita de Uva y Petit Grain aplicado de forma semanal, hidratantes de uso diario como el Sérum de Silicio y Jojoba, con un extra de hidratación con la mascarilla de Henna y Karité y champús respetuosos con tu cabello que lo mantendrán hidratado también en el lavado.